Estudio bíblico en video

Jesús sana a un leproso - (Marcos 1:40-45)

Jesús se encontró con un hombre de aspecto repugnante, excluido social y espiritualmente por causa de su lepra. Con una misericordia y amor divinos lo sanó y lo restauró a la vida dentro del pueblo de Dios. Después el Señor le mandó ir al templo para que cumpliera con los sacrificios establecidos en la ley para estos casos, algo que serviría para dar testimonio a los sacerdotes y también para demostrarles que se sujetaba a la ley de Moisés.