Estudio bíblico en video

El paralítico de Betesda (Juan 5:1-16)

El Señor se acercó a un hombre que era paralítico desde hacía treinta y ocho años y le preguntó: "¿Quieres ser sano?". Tal vez nos parezca una pregunta absurda, pero nada de lo que el Señor hace lo es. De hecho, cuando reflexionamos acerca del estado espiritual del hombre, aun se ve con mayor claridad que hay muchos que a pesar de tantos fracasos en la vida, no quieren acudir a Dios en busca de una solución. Viven sin poder escapar de su dilema personal, de los problemas y el vacío de su alma, y sin embargo se niegan a ser sanados moral y espiritualmente. A pesar de que se sienten totalmente insatisfechos con su situación, prefieren resignarse como excusa para no hacer nada y así seguir viviendo de la misma manera que les causa sus problemas...

Introducción (minuto 3:06)
Y hay en Jerusalén un estanque, llamado en hebreo Betesda... (minuto 6:33)
Yacía una multitud de enfermos que esperaba el movimiento del agua (minuto 8:50)
Y había allí un hombre que hacía treinta y ocho años que estaba enfermo (minuto 14:00)
¿Quieres ser sano? (minuto 15:25)
No tengo quién me meta en el estanque (minuto 18:30)
Jesús le dijo: Levántate, toma tu lecho, y anda (minuto 23:52)
Y era día de reposo aquel día (minuto 27:10)
Le preguntaron: ¿Quién es el que te dijo: Toma tu lecho y anda? (minuto 32:00)
Y el que había sido sanado no sabía quién fuese (minuto 34:50)
Después le halló Jesús en el templo (minuto 35:54)
Has sido sanado; no peques más para que no te venga alguna cosa peor (minuto 38:36)
El hombre se fue y dio aviso a los judíos que Jesús era el que le había sanado (minuto 48:12)