Estudios bíblicos por series
Serie: Doctrina Bíblica
La Salvación ()
La Salvación en Cristo es el tema que corre a través de toda las Escrituras. Con él se hace referencia a todo lo que Cristo ha hecho y hará para deshacer las obras del diablo y presentar a los hombres ante Dios libres de todos los trágicos efectos del pecado.
La resurrección de Cristo ()
La resurrección de Cristo ocupa un lugar principal para la fe cristiana, al punto de que si no se pudiera probar como cierta, todo el cristianismo se derrumbaría. Si Cristo no resucitó, la predicación de los apóstoles fue falsa, la fe de los creyentes es vana y nuestra esperanza de vida eterna sólo es una ilusión. Pero los hechos apuntan sin ninguna duda a que Cristo realmente resucitó.
La ascensión de Cristo y la resurrección de los hombres ()
Se suele dar muy poca importancia a la ascensión de Cristo en comparación con la obra de la cruz y la resurrección, sin embargo, el hecho es altamente significativo y merece meditación y estudio. Consideraremos también algunos detalles sobre la resurrección final de todos los hombres y sus implicaciones.
La obra mediadora de Cristo ()
Dado el enorme abismo que separa al hombre pecador del Dios santo y sublime, es necesario un Mediador, que no puede ser otro que Jesucristo: "Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre" (1 Timoteo 2:5)
La persona y obra del Espíritu Santo (1ª parte) ()
En este estudio consideramos la divina persona del Espíritu Santo a través de todo el Antiguo Testamento y los Evangelios. Veremos su implicación en la creación, en la transmisión de las Escrituras, en la forma en la que dirigía a los hombres de Dios, y especialmente, en su relación con el Señor Jesucristo.
La persona y obra del Espíritu Santo (2ª parte) ()
La Persona del Espíritu Santo tiene un papel fundamental en la vida del creyente. Somos bautizados en él cuando nos convertimos, además de sellarnos, regenerarnos y darnos dones para servirle... Es nuestra responsabilidad vivir en la plenitud del Espíritu manifestando su fruto y no apagarlo ni contristarlo...
Regeneración y conversión ()
Por la regeneración o nuevo nacimiento, Dios implanta la vida eterna en el corazón del creyente por medio del Espíritu Santo. Esto se produce cuando la persona escucha la Palabra y responde con arrepentimiento y fe en la Obra de Cristo.
La santificación ()
Cualquier persona llega a ser santa cuando se identifica por la fe con la muerte y resurrección de Cristo. Por lo tanto, la Palabra nos exhorta a vivir de acuerdo con esta realidad, haciendo morir cada día lo que pertenece al viejo hombre pecador, y siendo renovados en el nuevo hombre creado a la imagen de Cristo. Esto es la santificación a la que todos somos llamados.
Los pactos bíblicos ()
Dios estableció las condiciones de su relación con los hombres pecadores por medio de pactos. En la Biblia encontramos varios tipos de ellos. Por supuesto, para nosotros el más importante es el nuevo pacto establecido por Cristo por medio de su muerte en la cruz.
La gracia, la fe y las obras ()
La gracia de Dios es cuando él obra a favor de los hombres que nada merecen al sólo impulso de su amor. Por eso, cuando la Biblia afirma que la salvación es por gracia, quiere decir que debe ser recibida por la fe, como un regalo, y que no se puede pagar con ninguna obra que nosotros podamos aportar.
